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Los hermanos Quay. Animación en zona gris

Los hermanos Quay han realizado anuncios de televisión, cortinillas para la MTV y videoclips. Pero sus verdaderas pasiones los han arrastrado a ser unos de los más apreciados artisticamente creadores de cine de animación. Sus 'monstruos' en miniatura se exponen en La Casa Encendida

Sus trabajos son verdaderas obras de alta artesanía que se suelen ceñir a la animación, aunque ya se han visto inducidos por las imágenes en movimiento natural con actores. Ellos lo mezclan con maestría, con bajo presupuesto, sin posproducción, y siempre sin salir de su universo que se mueve en las lindes oscuras de la existencia, en la penumbra de todas las cosas, en ese lugar del arte puro que suele estar escondido.

Estos gemelos nacieron en 1947 cerca de Philadelphia, pero se mudaron a Londres a finales de los 60 para completar sus estudios en el Royal College of Art. De su pueblo original viene su gran interés por la cultura europea en la vena más surrealista y expresionista, por artistas como el animador checo Jan Svankmajer, el pintor alemán Max Ernst o el escritor polaco Bruno Schulz, gran musa de muchas de sus obras. Pellízquense ante sus declaraciones, lo de Kafka era de chiste.

En estos tiempos de rutilantes estrellas, ¿dónde reside la gran atracción de la zona gris? Para nosotros la zona gris es el lugar donde nadie mira, donde nadie busca 'eso'. Es como una especie de refugio para ciertas verdades invisibles.... Las grandes verdades que siempre merodean en el perímetro de la vida y que nunca se tienen en cuenta, por lo que también minan la estabilidad.

¿Os sentís cómodos en las sombras?
Probablemente somos como esas plantas de los bosques que sólo pueden sobrevivir con una luz mínima. O como ciertos peces que viven en las profundidades y que explotarían si ascendieran demasiado. Hay un mundo secreto ahí fuera que hay que pulsar y que no coincide con nada de lo que creemos o que creemos que sabemos... Es la atracción de lo singular y de lo oculto.

Sentís gran pasión por la música, el teatro, la danza y el ballet. ¿Qué importancia dais a vuestros trabajos teatrales y operísticos?
Para nosotros se trata de cómo un conjunto se fusiona en un potencial fabuloso, que es lo que más nos atrae, una forma de arte que propone multitud de cosas y por tanto es mucho más provocativa. Y la composición musical es la narrativa indefinida más grande,  la más misteriosa e innconmensurable dramaturgia a la que jamás podríamos aspirar.

Sois conocidos por tener una conexión mental muy fuerte...
Bueno, hay que tener en cuenta que hemos sido gemelos idénticos toda nuestra vida... es inevitable que desde el punto de vista de un extraño podamos caer en una cierta mitología. Sin embargo, nosotros solo nos damos cuenta cuando hay gente que mira, se muestran curiosos, o incluso sienten envidia... Pero para nosotros es algo completamente normal, y es útil a la hora de crear.

Hermanos Quay. Animación en zona gris