<
>
 
Fernando Cayo

Morir de risa
 
Por Paloma F. Fidalgo
 
Tres buenos amigos, una cena y la sombra de la muerte amenazando en el ambiente. Esto es Páncreas, una comedia con una trama que esconde incógnitas hasta el final y apela a situaciones que se plantean a la hora de decir adiós a un ser querido, envolviéndolas en humor y enredo.
 
'Es una obra de teatro de las de carcajada. Yo creo en la función social del humor, y creo que, tal como están las cosas, estos textos son beneficiosos, sirven de curación del alma', explica Fernando Cayo, uno de los intérpretes (y coproductor) de la pieza, dirigida por Juan Carlos Rubio. 'Patxo Tellería [autor del texto y líder de la compañía vasca Tartean] consigue aquí algo tan difícil y original como unir la tradición del verso de nuestro teatro, porque la pieza está escrita en un verso ágil y cercano, con la estela de nuestros referentes del humor absurdo, como Jardiel Poncela o Tip y Coll'.
 
El resultado, a su juicio, trascenderá como 'uno de los mejores del teatro español actual'. 
Cayo nos comenta que la obra 'maneja códigos del clown, tan abierto y explosivo', y confiesa que es una suerte haberse formado “en una escuela extraordinaria en este sentido: la Erhard Stiefel del Teatre du Soleil, donde practiqué técnicas de Commedia dell’Arte'. 
 
En Páncreas, comparte protagonismo con José Pedro Carrión y Alfonso Lara, no solo en la interpretación sino en lo musical, sentándose incluso al piano, en un escenario austero y evocador de Magritte y el gótico inglés. 'Es una obra muy coral, un gran mecanismo de diversión, de relojería suiza, donde cada uno de nosotros encuentra escenas, fogonazos muy efectivos para desarrollarnos, para tener nuestro momento'. 
 
Páncreas está en la cartelera madrileña, ahora en el Teatro Amaya, por segunda temporada, y de vuelta de una exitosa gira nacional. Y eso, con los tiempos que corren. ¿O será que la crisis obliga a rentabilizar una obra mucho tiempo? 'No es fácil hacer girar las obras ahora. Es todo un triunfo mantenerlas tanto tiempo con las condiciones impositivas que tienen las entradas de teatro, como tantos otros productos y servicios. Afortunadamente, en esta obra contamos con Concha Busto, el gran nombre de la producción teatral en este país, que estuvo detrás de Marsillach en la creación del Centro Dramático Nacional y de la Compañía Nacional de Teatro Clásico'.
 
En este panorama, el circuito de salas pequeñas da un respiro, cree, a las propuestas escénicas independientes, que no siempre son bien acogidas en las salas más comerciales. 'Hay que apoyar estos locales, porque son el hogar donde se fragua el nuevo teatro, el del futuro'. Posiblemente con ese ánimo él participó en dos obras de la gran dramaturga emergente Denise Despeyroux, una en la (ya desaparecida) Sala Kubik Fabrik y otra en la Sala Mirador.
 
Foto© Sergio Parra / Páncreas · Teatro Amaya · Hasta el 13 de noviembre
 
Sus recomendaciones
Para comer: La Pescadería (Ballesta, 32). Una copa: Terraza Atenas (Segovia, s/n). Y nos encomienda a 'salir a la periferia de Madrid, que es magnífica. A Aldea del Fresno, por ejemplo. Quizá aún se puede disfrutar de la playa del Alberche'. 

Fernando Cayo. Morir de risa