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Segunda LunaRun: ¡a bailar! A un runner no solo le vienen bien unas buenas piernas; no está de más una garganta en condiciones para animar el paso con alguna cancioncilla. Así se hizo en la segunda edición de las LunaRun madrileñas de 2012, que se celebró ayer, dedicada a la música. Cinco km de carrera por el centro de Madrid con cinco pruebas musicales, mucha risa y mucho calor en el camino. Ocho de la tarde del 24 de mayo. Treinta grados a la sombra calientan el asfalto del centro de Madrid, un auténtico hervidero de gente. Pero 345 corredores se han congregado en la Plaza de Colón para desafiar a los elementos en la segunda de las cuatro LunaRun de 2012, unas carreras de entrenamiento con pruebas intercaladas que, por segundo año consecutivo, organiza Nike en la capital todos los jueves hasta el próximo 7 de junio. "El año pasado fueron en invierno. No se pasaba tanto calor ni había tantas personas por la calle. Aun así, prefiero correr con luz y buen tiempo. ¡Y me encanta cómo está planteada hoy la gymkana!", nos cuenta Lucía, una de esos valientes, durante el calentamiento, calzada con unas Nike Free que la organización ha prestado a los participantes que han querido probarlas. El planteamiento al que se refiere es la temática en torno a la que giran las pruebas, temática que varía cada tarde de LunaRun, y hoy es la música. Una vez puestas las pilas con el ritmo marcado por el incombustible speaker y atleta Sergio Garde, a base de bailoteos al compás del clásico Déjame de Los Secretos y del ensayo de un flashmob que se marcarán los participantes el 7 de junio en los Jardines del Descubrimiento, los runners echan a correr Recoletos arriba. Se orientan con unos planos del centro de Madrid donde tienen delimitado el circuito que han de culminar, que incluye un conjunto de pruebas que ha de superarse en menos de cincuenta minutos para poder disfrutar del refrigerio de bebidas y pizza que aguarda en la meta, sita en el mismo punto que la salida. Unos pasitos de ballet frente al Palacio Real, un tango en la Plaza de Santa Ana o la coreografía del Chiquilicuatre en Tribunal son tres de esos cinco retos a los que se enfrentan, muertos de risa, los participantes, ante las incrédulas caras de los madrileños que se cruzan con ellos. Ganan la edición dos corredores habituados a eso de subirse a un podio: Anna Serrallonga en categoría femenina y Andreu Blanes en masculina. Pero, los más entonados, aun acabado el recorrido, tienen fuelle para subirse a un karaoke-cinta de correr y seguir quemando suela mientras, micro en mano, emulan a Amaral o a Bisbal. ¿Con qué nos sorprenderán en la próxima LunaRun? No te la pierdas... Mantente informado en Para ver el vídeo de la segunda LunaRun, haz clic aquí Próximas citas: 7 de junio Lee el post de las anteriores LunaRun: Texto: Paloma F. Fidalgo/ Fotos : Nike Sportwear
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