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Crónica del Festival Noroeste Estrella de Galicia

(y pequeña guía para perderse por A Coruña)

por Andrés Castaño

A Coruña ha renovado el Festival Noroeste, en su trigésima edición, y lo posiciona en primera línea de parrilla: establece el equilibrio perfecto de lo que debe ser un festival urbano, acomodándose a su urbanismo, recuperando el centro histórico. Y eso combinando grupos internacionales y nacionales de éxito, clásicos, con una selección exquisita de la escena nacional y la local.

Galicia cuenta en la actualidad con un plantel de festivales de órdago, que desde hace años ocupan un lugar entre los festivales nacionales más apetecibles. Festivales que combinan entorno, cartel, gastronomía y buen ambiente: Atlantic Fest, Portamérica, Sin Sal, V de Valarés o el Noroeste, éste último que ocupa nuestra atención aquí. Y es que conseguir lo que ha conseguido el Noroeste en 2016 es todo un logro. El Noroeste ha sabido reinventarse, gracias al esfuerzo del Ayuntamiento de A Coruña, de la mano de Xulio Vázquez López, el director artístico de esta edición, con la colaboración especial de Estrella Galicia ampliando su escenario de la Playa de Riazor, con escenarios urbanos y con un domingo de conciertos de día junto al Mercado de la Cosecha.

Ajustando los presupuestos con un criterio de calidad y diversidad, y sin perder la misión de abrirse a todos los públicos, Noroeste ha conseguido articular su nueva cara con cuatro espacios urbanos y tres espacios cerrados. Siguiendo el modelo, quizás de una manera casual, que hace desde 2010 el Primavera a la Ciutat (del festival barcelonés Primavera Sound), pero aquí funcionado como un eje vertebral (no como una extensión) en un afán de recuperar la calle, el centro histórico y combinarlo con la cultura: excelentes sus escenarios de la Plaza de las Bárbaras, la Plaza de San Nicolás, el Campo da Leña, el Castillo de San Antón, y tres espacios cerrados como la Fundación Luis Seoane, la Casa Museo Casares Quiroga y la Iglesia de las Capuchinas. Fueron tres noches de conciertos (martes 2 de agosto, miércoles 3 y jueves 5) en un ambiente que se adapta a la idiosincrasia de la ciudad, al sentir urbano, y que abre sus puertas a un radiante abanico de sonoridades.

En esos oasis urbano musicales, disfrutamos de conciertos apoteósicos como el de los madrileños Melange, a base de psicodelia con rock andaluz; el poderío rock de Lagartija Nick o el revival 60’s de Julián Maeso, que cuenta con una banda de aúpa y bordaron uno de los conciertos del festival. Pero es que el cartel incluía joyas internacionales como Howe Gelb, Neil Halstead; propuestas dispares como Tachenko (que hicieron bailar a los niños en las primeras filas), Niño de Elche, Chicharrón, Carmen Boza o Sex Museum. O la experimentación de los catalanes Cabosanroque (luthiers que inventan sus máquinas e instrumentos) o Balago, Robert Pier o Christoph Berg, entre otros.

Todo eso unido al clásico escenario de la Playa de Riazor, que viernes 5 de agosto y sábado 6 ofrecieron la nota más masiva, con las actuaciones estelares de Ocean Colour Scene y The Editors en el apartado internacional; Freedonia y Triángulo de Amor Bizarro (TAB) como estrellas nacionales. TAB, coruñeses, estaban encantados de tocar por primera vez en la Playa, “un lugar en el que hemos visto a tantos grupos que nos encantan. Y ahora nosotros aquí arriba. Es un placer” decía Rodrigo Caamaño. Ofrecieron un poderoso directo, al que le faltó algo más de potencia de sonido, para resultar arrollador e imparable, en la recta final miraron a su debut con “El Fantasma de la Transición”. También actuaron unos Ocean Colour Scene descafeinados, en parte por la desgana del vocalista Simon Fowler, Steve Craddock a la guitarra sigue siendo infalible, los de Birminghan atraen a un público curtido musicalmente en los 90, cuando triunfaron en nuestro país con su disco ‘Moseley Shoals’(1996). El sábado fue el turno de una combinación diversa, los madrileños Fredonia, con esa combinación explosiva de funk y soul y un directo imponente e impecable, la vocalista Maika Sitte hace vibrar con su poderío vocal y una amplia gama de destellos. Y como cabeza de cartel The Editors, no faltaron clásicos como “Racing Rats”, “Munich”, “A Ton of Love” o “Papillon”, un público más veinteañero que disfrutó de la solvencia de los británicos liderados por Tom Smith. También supuso la alternativa para cuatro bandas locales, Cora Sayers, O Cadelo Lunático, Komódo y Look Out Brother!, las dos primeras el viernes y las dos últimas el sábado, abriendo la noche.

El broche de la edición fue el Mercado de la Cosecha, en el Parque del Paseo de los Puentes, el domingo 7 de agosto desde las 12 del mediodía. Una iniciativa que conecta con los productos naturales y la vida rural, pensada para un público familiar y misceláneo. En el constructivo afán de acercar el mundo rural a la ciudad, dar a conocer los productos naturales de la tierra, y todo ello a base de actividades para niños y juegos, como plantar un huerto… junto a música de día. Nos encandilaron dos propuestas muy gallegas, Os Amigos Dos Músicos con un folk muy auténtico cantado en gallego, y el songwriter Pablo Seijas. El poder de seducción de la música, que nos sorprende y su capacidad para sonar a todas horas.

A Coruña, una ciudad en plena efervescencia

Por Andrés Castaño      

A Coruña puede presumir de ser una ciudad abierta al mar, y a la ría. Y esa apertura, pese al carácter impetuoso y virulento del Océano Atlántico, le aporta una personalidad propia y recia. En A Coruña pasan muchas cosas, e intuyo que cada vez pasaran más. Por motivos del carácter coruñés, y por motivos sociológicos: ese eje importante de la industria textil, más de 3.500 personas trabajan en Arteixo, cerca de A Coruña. Y también por otros factores, como la labor de Estrella Galicia en la programación musical, o la de salas como Mardi Gras, con ciclos pasado de conciertos que tuvo como el 981Heritage, la programación cultural de un ayuntamiento sensible a sus habitantes o festivales como el Noroeste. Es una ciudad abierta, amable, en la que sus gentes buscan el encuentro, y como no, el jolgorio. En gran parte ese alboroto sucede gracias a un público receptivo y a una oferta cada vez más amplia de salas y programadores.

La ciudad está presidida por tres ejes imperiales. El Monte de San Pedro, con esa mirada majestuosa al Atlántico. La Torre de Hércules, referencia y consorte de la ciudad y legado de todos los pueblos que lo poblaron. Y el Castelo de Santo Antón, fortificación

Zona de compras, por la zona de Orzán (llamado el Soho de A Coruña), o por la zona de la Plaza de Lugo, o  repleta de tiendas de ropa y con un mercado digno de ser visitado ¡Menuda maravilla de pescaderías! Y cerca la Casa Museo Picasso, en la calle Páyo Gómez. El padre de Picasso estuvo destinado en Coruña y Picasso vivió con sus padres allí.

Agosto es el mes de las fiestas de María Pita, la patrona de la ciudad, que se extienden durante todo el mes de agosto. Fiestas con inspiración de calle, a festa da rúa. Con eventos relevantes como la escala final de la regata de The Tall Ships Races o el Salón Internacional del Cómic ‘Viñetas desde o Atlántico’.

En el plano cultural, cabe resaltar la Fundación Luis Seoane (www.fundacionluisseoane.gal), junto a la ciudad vieja. En la Avenida de la Marina están la Fundación Abanca (www.afundacion.org)  y la Barrié (www.fundacionbarrie.org). Y enfrente, en los jardines de Méndez Núñez, el Kiosko Alfonso (www.coruna.gal), un bello edificio modernista.

A Coruña da noite

Mardi Gras

Travesía Torre, 8

Una sala que programa grandes conciertos durante todo el año, dirigida con pasión. Sueña con el pasado, suena de lujo. Vive de los sonidos añejos pero con una mirada puesta en el presente. Rock, garage, punk, country, folk… No hay sonido que se resista. Ah, y las sesiones dj son la mar de animadas, hace poco estuvo Silvia Superstar (dueña de El fabuloso). www.salamardigras.com

Jazz Filloa

Rúa Cega, 1 esqu. Rúa Orzán, 31

En una travesía de la Rúa Orzán se esconde un lugar mágico. Un club de jazz con historia y con mucha solera. Un templo por y para la música. Donde la música preside el ambiente. Sus dimensiones lo hacen aún más familiar. Podría incluirse entre los mejores clubs con el Jamboree de Barcelona y el Café Central de Madrid. www.jazzfilloa.com

Bristol

Rúa Torreiro, 11

UK vive en Coruña, en un bar mítico en pleno centro y cerca de la zona de tapas. Con una decoración pop-art muy musical, portadas de discos foráneos y locales. Y con programación de djs según temporada. Tiene una terraza que se agradece mucho en verano. Lugar arraigado a la escena musical coruñesa. Música indie y pop de hoy, de ayer y de siempre. www.facebook.com/bristolbar1995

Puticlú

Rúa Justicia, 18

Un bar de ambiente lleno de esplendor, con una decoración totalmente incidental pero bien pensada. Se crea una atmósfera bien salá, distendida y con un buen rollo a diestro y siniestro. Se baila de lo lindo. Pinchadas sobre todo electrónicas, con algo de petardeo, hits mainstream, 90’s y lo que se tercie. Es uno de los clubs sin duda más divertidos. Un luminoso anuncia una recomendación a tener en cuenta: “chupar relaja”. www.facebook.computiclumontealto

Playa Club

Andén de Riazor s/n

Es un clásico, donde suena la mejor música de los 80 y de los 90. Y música actual de la mano de un nuevo plantel de djs. Para alguien que viene de Madrid, poder bailar con una cristalera al horizonte, en la que vislumbras la playa de Riazor, es una auténtica gozada. Y eso me recuerda al Bataplan de la Playa de la Concha, en Donosti. http://playaclub.club

Gastronomía 

En Galicia se come muy bien, eso es un hecho incuestionable. Buen vacuno, buen cerdo, buen marisco, buen pescado, buen pan de tahona, buena leche, buenos quesos, y podría seguir...  En A Coruña ponerlo en práctica es muy fácil, tanto como dejarse seducir por tabernas y restaurantes. Las tres calles más famosas de la gastronomía coruñesa, Estella, Olmos y Galera, que siguen una a otra como la sucesión de un gran banquete, y es que pueblan una gran mayoría de restaurantes y tabernas que constatan el alto pedigrí. Es muy difícil equivocarse, puedes acertar casi hasta con los ojos cerrados. Una recomendación digestiva, el licor café casero, pero cuidado que es bien traicionero.

Barberia

Rúa Orzán, 15. Abre De 12 a 03. Cierra domingos y lunes

Premio especial a la gastronomía creativa para este restaurante de nueva cocina, con mucho de clásico pero con un toque fresco (lagarto, pulpo, setas, tarta de mora de la mama…). El menú degustación es un placer para el paladar, todo a base de productos frescos de temporada y con un toque ideal en salsas y guarniciones o maridajes. También es un bar de copas remolón y hace sesiones vermú musicales. www.facebook.com/barberiabar

A Taberna de Cunqueiro

Rúa Estrella, 22

Restaurante de cocina tradicional gallega (empanada, pulpo con cachelos, zamburiñas, navajas, raxo, rape, bacalao,…). Su fundador Àlvaro Cunqueiro, natural de Mondoñedo, acostumbraba visitar la zona de Pescadería para tomarse unas cuncas de vino. De ahí que fuera en una de esas calles donde abrió su restaurante en 2009. Un clásico para lugareños y foráneos. Cuenta con muy buenas críticas en las webs de referencia culinaria. El sabor da terra galega. http://atabernadecunqueiro.com

Alma Negra

Calle Barrera, 13

El concepto negra tiene tres locales en A Coruña. Tapa Negra, Bocanegra y Alma Negra. Cuidan la estética de sus locales (obra del interiorista Martín Félix Massa) y la cocina, una cocina de autor que encaja con la tradicional. Todo muy rico y en su punto.  Variedad culinaria (presa ibérica a la brasa, Pulpo á Feira, Zamburiñas en muselina de cebolla, Alma de sushi, croquetas, hamburguesas…). Parece un poco como un decorado ideal. www.conceptonegra.com

Cavita

Rúa Galera, 13

Uno de los locales míticos de tapa. Parada obligatoria de tapeo coruñés. Barato y rico todo. Tapa de calamares, de pollo empanado, todas a 1,10 euros. Con fundamento. Un sitio donde la economía no es excusa para degustar unas buenas tapas. Eso sí, suele estar a reventar.

Un festival urbano con mar. Crónica del Festival Noroeste 2016