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Foto ganadora del World Press Photo 2018

Fotoperiodismo expuesto

por Javier Agustí

Invitados por Canon España, que es uno de los patrocinadores del certamen, pudimos asistir a la presentación en el Colegio de Arquitectos de Madrid de la exposición World Press Photo 2018. En ella tuvimos el privilegio de conocer y charlar con Javier Arcenillas, que ejerce de embajador de la reputada marca de cámaras en su ámbito profesional. Arcenillas (Bilbao, 1973) ha recibido este año el premio en una de las categorías de mayor prestigio,Long Term Project, poruna labor continuada a lo largo del tiempo,por su proyecto de fotografías realizadas a lo largo de nueve años en Latinoamérica. Las fotos presentes en la exposición hacen referencia a parte de su trabajo desarrollado en Guatemala.

La exposición que podemos ver hasta el 4 de noviembre es todo un homenaje a los profesionales del fotoperiodismo. Muchos de ellos se juegan la vida a diario para que nos podamos enterar de lo que sucede en el mundo. La fotografía ganadora de este año es obra del fotoperiodista venelozano Ronaldo Schemidt, de la agencia France-Presse. En ella podemos ver a un joven en llamas tras explotar el depósito de gasolina de una moto durante una protesta contra Maduro en Venezuela.

Hay un segundo español premiado este año, Daniel Beltrá, residente en EEUU, que ha ganado el tercer premio en una nueva categoría, “Medio Ambiente”, con una fotografía sobre la deforestación en la región amazónica de Brasil.
La exposición de este año está compuesta por 146 fotografías ganadoras (de las 73.000 presentadas a concurso) que son un resumen de lo mejor del periodismo gráfico del año.
Las entradas están a la venta en su web.
 

Javier Arcenillas: jugarse la piel

El impactante trabajo de Javier Arcenillas contando historias a través de sus fotografías es parejo, en capacidad narrativa, al de su pericia verbal para expresar las anécdotas e historias que hay detrás de cada una de ellas. Y todo ello con un gran sentido del humor y una humildad que le honra.

Arcenillas, que compagina su labor como fotógrafo documental con la docencia en la Escuela PIC.A de fotografía, en Alcobendas, expresaba las dificultades con las que tiene que vivir un profesional del reporterismo, a pesar de estar uno jugándose el pellejo.

En sus fotos premiadas ahora la violencia cotidiana estalla frente a nuestro rosto mostrándonos la cruda realidad con la que cada día conviven millones de habitantes de tantas ciudades de Latinoamérica y otros países del planeta.

En la charla que compartió con los medios nos contaba, entre otras, algunas dramáticas vivencias vividas en Guatemala, en donde tuvo acceso a muchos ámbitos de la delincuencia organizada en sus reportajes, como cuando tuvo que permanecer tirado en la calle durante una noche tras una balacera (un tiroteo) o cuando tuvo que enfrentarse a un asaltante que le apuntaba con una pistola y al que pudo reducir, para lo que a buen seguro le sirvió su pasada labor en el ejército, con el que estuvo destinado en varias misiones antes de convertirse en fotógrafo profesional.

World Press Photo 2018. LASEDE del COAM. Hortaleza, 63. Madrid.
Del 5 de octubre al 4 de noviembre

Fotoperiodismo expuesto