DISEÑO INDUSTRIAL
Oki Sato – Nendo

Siendo estudiante de arquitectura, Oki Sato (Toronto, 1977) quedó deslumbrado por el interiorismo y el diseño industrial tras una visita a la Feria de Milán. Apenas se graduaba ya instalaría su propio estudio en Tokio, del que brotaría un caudal de creatividad, elegancia y sentido del humor. Sus objetos, grandes y pequeños, importantes o accesorios en el hábitat cotidiano, sus espacios e instalaciones, siempre resueltos de manera impecable, obtuvieron fulgurante reconocimiento mundial y un buen montón de premios. Nendo –el nombre de su estudio, que significa arcilla- abrió oficina en Milán en 2005 y en sólo cinco años ha trabajado para las firmas europeas de mobiliario más importantes y para todo tipo de marcas. Además ha creado su propia firma 1% en la que vuelca sus más experimentales proyectos en series limitadas de 100 unidades. Lo interesante del trabajo de Nendo es que aparenta ser enigmático pero trasluce el proceso de reflexión que ha requerido su creación. Sus objetos y los espacios creados siempre expresan un discurso emocionante, una luminosa naturalidad, su extremada simplicidad y resaltan una arrebatadora eficiencia. Por ello están a la cabeza del diseño hoy, y parece que lo van a estar por un tiempo. Entre sus últimos proyectos destacan la decoración de espacios singulares como una cafetería-guardería para padres con niños pequeños o una clínica psiquiátrica. Este año también ha presentado Wire Chair, la nueva vuelta de tuerca a su anterior Cord Chair, una recalcitrantemente artesanal silla cuyas patas solo tienen 15 milímetros de diámetro.

Texto: Christian Osuna.

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Artículo publicado en la edición nº 4 del Anuario del Diseño. Editado por Grupo Duende